Este es un pasaje del Libro de las Revelaciones bien conocido por todos:
«Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre. Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis».
(Apocalipsis 13:16—18.)
Y esta es una noticia del 11 de noviembre de 2009 (11 del 11)